Se trata de un pequeño cojín que se utiliza como sostén para la lordosis ya sea a nivel lumbar que cervical. Colocándolo entre la zona lumbar y el respaldar, constituye un soporte válido para la lordosis. Por lo tanto puede ser utilizado en todas las sillas normales con respaldar y también en el asiento del automóvil.
La Back School propone el uso de tales soportes para conservar las curvas fisiológicas, no sólo durante las actividades cotidianas, sino también durante los ejercicios con la alfombrilla y durante las sesiones de relajamiento.
En caso de combinación con una camilla de consultas o tratamientos es posible seleccionar el mismo color de los forros.